Cuando tu hijo está batallando con estados de ánimo, pensamientos o comportamientos difíciles de manejar, tal vez sientes que emocionalmente vas montada en una montaña rusa. Tu hijo es todo un amor contigo y de repente cambia y explota. En ese momento quizás te dice palabras que no esperas, aquellas que es difícil escuchar. Quizás tu hijo está batallando con sus calificaciones o con su habilidad de socializar con otras personas. A lo mejor no come ni duerme de manera regular como se debe. Seguramente te sientes muy confundida, asustada, frustrada y preocupada, y con toda la razón del mundo. Probablemente tu hijo también lo está.
A pesar que hoy en día se sabe mucho sobre las condiciones de salud mental, todavía existe mucho estigma sobre éstas. (Esto significa que quizás otros piensen mal de ti y de tu hijo debido a su condición de salud mental o que tú o tu hijo sientan vergüenza, deshonra o como que son diferentes debido a la condición). Así que quizás te sientes incómoda o dudas sobre si decirles a tus amigos y familiares que estás pasando por esta situación.
La buena noticia es que en realidad no estás tan sola cómo te sientes. Así que respira profundo, sigue leyendo y siente la certeza de saber que puedes conseguir ayuda.
Si consultas las páginas que tenemos en esta sección, podrás infórmate sobre:
También puedes estar en contacto con otros padres de familia quienes tal vez tengan las mismas preguntas que tú, o sienten lo mismo que sientes tú ahora que empiezas a recorrer este camino. Y recuerda que puedes encontrar servicios y grupos de apoyo en tu región de Texas.