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Quizás tu hijo está actuando de una manera diferente y no sabes qué hacer a continuación. Cuando eres la madre de un niño con discapacidad intelectual o del desarrollo (IDD por sus siglas en inglés), a veces es difícil entender sus sentimientos y comportamiento. A lo mejor está recibiendo el tratamiento y servicios de apoyo que necesita, pero aun así, algo no está del todo bien.
La verdad es que, de acuerdo a la investigación en la Jornada de Discapacidad Intelectual y del Desarrollo, 30–50% de los niños con IDD pueden padecer de una enfermedad de salud mental. Este porcentaje es mayor que el promedio entre todos los otros niños. Desafortunadamente, estas condiciones pueden pasar desapercibidas. Si piensas que tu hijo presenta síntomas relacionados a su salud mental, esta página te ofrece algunas ideas sobre la forma de hablar con las personas que ya están trabajando con él y con tu proveedor de cuidado de la salud.
También puedes visitar nuestra página sobre Salud mental y salud del comportamiento para mayor información. Tú tienes el poder necesario para pedir apoyo con la salud mental de tu hijo.
El estado de salud mental de una persona afecta directamente en cuanto a la calidad de vida que tendrá así como en cuánto vivirá. Eso es cierto para todos los niños y adultos, pero especialmente para los niños con IDD. Es muy importante ayudar a que tu hijo tenga una buena salud mental, sin importar cuáles sean sus habilidades.
Hay diferentes razones por las cuales las personas con IDD quizás tengan mayores necesidades en cuanto a la salud mental. Quizás sientan más estrés y retos en cuestiones sociales que les es difícil de manejar. A lo mejor su habilidad de hablar es limitada o tengan síntomas del sistema nervioso que afectan su salud mental. Ellos enfrentan un riesgo más alto de vivir un trauma, tal como abuso, olvido, intimidación, control y más. Y pasar por un trauma puede hacer que inicien los síntomas de salud mental.
Los diagnósticos de salud mental comunes de niños con IDD son ansiedad, trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD por sus siglas en inglés) y trastornos de conducta. Cuando una persona tiene ambos, una discapacidad de desarrollo y una condición de salud mental, a esto se le llama “trastornos simultáneos” o también a veces se le llama “doble diagnósticos”.
Nuestra página Encontrar recursos de salud mental para niños tiene más información sobre proveedores y programas de salud mental que pueden ayudar a tu hijo. A continuación también hay consejos sobre la manera de empezar a hablar sobre salud mental con el proveedor de tu hijo.
Aquí hay otras páginas importantes sobre la salud mental:
Existen algunos mitos sobre los niños que tienen IDD y enfermedades de salud mental. Algunas personas piensan que los niños con IDD no pueden padecer de enfermedades de salud mental. O que el tratamiento estándar de salud mental no funcionará en ellos. O que los servicios para salud mental no funcionarán si se combinan con los otros servicios que ya está recibiendo el niño. Pero nada de esto es cierto. No hay ninguna razón por la cual un niño con IDD no pueda también tener una o más enfermedades de salud mental.
Lo que debes saber es que es fácil que cualquiera, ya sea la familia, los maestros, los terapeutas, los cuidadores y otros proveedores de servicios no entiendan a tu hijo. Quizás los cuidadores y profesionales que trabajan con él, no se den cuenta que su condición de salud mental es lo que está causando comportamientos desafiantes y que piensen que se deben a su discapacidad. Así que en lugar de empezar a desarrollar algo como un Plan de Intervención del Comportamiento (BIP por sus siglas en inglés), quizás puedas pedirle a la gente que trabaja con tu hijo que se fijen en su salud mental.
Si la personalidad o el comportamiento de tu hijo parecen cambiar repentinamente, es un buen momento para indagar. A lo mejor lo que necesita son servicios de salud mental. Puedes ayudar a tu hijo y a quienes trabajan con él para ver qué está pasando.
A lo mejor tu hijo puede explicarte qué siente que está mal o es diferente. A lo mejor no te lo puede explicar. De cualquier forma, si está actuando diferente y estás preocupada, recuerda que hay apoyo disponible.
Tal vez quieras buscar ayuda en salud mental si tu hijo:
Puedes informarte más en nuestra página cuando conseguir ayuda para la salud mental de los niños.
Trabajar con un proveedor de cuidado de salud para diagnosticar la condición de salud mental de tu hijo y encontrar el tratamiento correcto quizás requiera que tengas mucha paciencia. Especialmente si a tu hijo se le dificulta comunicarse y decir qué es lo que tiene. Tú puedes pedir que te den más tiempo para hablar o que te programen una cita más larga. Así tú, tu hijo y el proveedor pueden analizar su condición de salud mental más detenidamente.
Estas son algunas ideas que les ayudarán en este proceso:
Cuando hables con un proveedor de salud mental o cuidado de la salud, hay ciertas preguntas que tanto tú como tu hijo, deben preguntar para informarse y tomar la mejor decisión:
Pero lo más importante, es que nunca debes olvidar que tú y tu hijo no están solos. Cada vez hay más información y se realiza más investigación acerca del tratamiento de salud mental para niños con IDD, así como también más proveedores que están aprendiendo sobre la mejor manera de ayudar.