A veces, a pesar de mucho trabajo, un matrimonio termina.
Para los padres es una etapa emocional puesto que tienen que tratar de separar todo aquello en sus vidas que los unía. Este proceso es aún más complicado para las parejas que tienen hijos con discapacidad o necesidades especiales de salud.
Hay muchas cosas que hay que tomar en cuenta:
¿Quién tomará las decisiones médicas y de la educación de tu hijo?
¿Tu hijo va a estar seguro cambiándose de una casa a otra?
¿Cómo vas a asegurarte que los gastos médicos o de la terapia de tu hijo estén cubiertos?
Hay muchos recursos disponibles que te pueden ayudar durante estos momentos de estrés a continuación, te tenemos algunos de éstos. También hay personas como abogados, consejeros y mediadores que te pueden ayudar si tú y tu pareja no pueden llegar a un acuerdo sobre el plan del divorcio. Así como también el plan de cuidado y tratamiento de tu hijo.
Queremos que sepas que otros padres de familia han pasado por lo mismo que estás pasando tú, y salieron adelante.
Esta página incluye algunas cosas importantes que debes tener en mente y que tienes que planificar durante un divorcio cuando tienes un hijo con discapacidad o necesidades especiales de salud.
Cuando los padres se divorcian, necesitan tener un acuerdo legal que especifique detalladamente que sucederá con la custodia de los hijos y los bienes comunales.
Cuando tienes un hijo con discapacidad o necesidades especiales de salud, hay ciertas cosas adicionales que debes considerar al establecer un acuerdo. Más que nada, quieres estar segura que tu hijo recibirá todo lo que necesita y que ustedes, como sus cuidadores, aún puedan recibir apoyo para cuidarlo. Esto es algo que afectará casi todas las decisiones que tomen durante el proceso del divorcio.
Estas son algunas cosas en las que tienes que prestar mucha atención.
La manutención de niños es la cantidad de dinero que un padre debe pagarle al otro para la manutención de un hijo.
Estas son algunas de las cosas en particular que deben incluirse en un acuerdo de manutención de niños cuando tienes un hijo con discapacidad o necesidades especiales de salud:
En un acuerdo de divorcio estándar, la manutención de niños y custodia terminan en el momento en que el hijo cumple 18 años de edad o después de que acabe la universidad. Pero quizás tu hijo necesite que lo apoyen económicamente el resto de su vida, por lo tanto, el plan de manutención de niños debe tomar en cuenta sus necesidades a largo plazo. Aunque consideres que no necesitará apoyo cuando sea adulto, los planes de manutención de niños deben cubrir su transición a la vida adulta, incluyendo aquellos sobre el seguro médico, las colegiaturas, su atención médica y las actividades de recreo.
Los cálculos estándar de manutención de niños no incluyen los gastos adicionales que enfrentan cuando tienen un hijo con discapacidad o necesidades especiales de salud, tales como terapias, medicamentos o equipo especial. No olvides incluir estos gastos en el acuerdo.
Los acuerdos de custodia son los que indican dónde vivirá tu hijo y quién tomará las decisiones sobre su atención médica, su situación financiera y su educación.
Aquí hay algunas ideas que quizás te interese incluir en el acuerdo de custodia:
Quizás tu hijo no pueda quedarse a dormir en casas diferentes o cambiar de una a otra cada semana. La American Bar Association (Asociación Americana de Abogados) recomienda que el hijo se quede en casa de cada padre de familia por un periodo de tiempo más largo y que no tenga que cambiarse de casa durante el año escolar.
¿Quién tomará las decisiones sobre la atención médica y educación de tu hijo? ¿De qué manera tomará las decisiones el padre asignado? Por ejemplo, ¿quién asistirá a las reuniones del Proceso de admisión, evaluación y salida de la escuela (ARD) o de la Sección 504 de tu hijo? ¿Quién tomará las decisiones sobre una nueva terapia o un medicamento? ¿Qué sucede si tu hijo recibe un diagnóstico nuevo?
Cuando tu hijo cumpla 18 años de edad, ¿quién tomará las decisiones médicas u otras? ¿Considerarías la posibilidad de asignar la tutela o custodia legal a alguien, o usar otras herramientas legales?
Si tú o tu pareja decide volverse a casar, ¿cuánto estará involucrada la nueva pareja en el cuidado o en las decisiones que se tomen sobre tu hijo?
¿Qué pasa si uno de ustedes dos se muda fuera del área donde viven ahora y por lo tanto no puede ayudar con el cuidado diario de tu hijo?
¿Qué pasa si uno de ustedes dos decide que ya no puede ayudar a cuidar de tu hijo? ¿O si uno de ustedes ya no es capaz de cuidarlo?
Un plan de crianza de los hijos incluye los detalles sobre el cuidado diario de tu hijo y la manera en que tanto tú como tu pareja colaborarán en ello. Entre más detallado sea le plan, más fácil será proveerle un cuidado consistente a tu hijo cuando el divorcio sea final.
Estas son algunas de las cosas que quizás quieras incluir en el plan de crianza de los hijos:
Una lista detallada de las actividades diarias en la rutina de tu hijo y lo que necesita en cuestiones médicas.
Las terapias a las que va tu hijo cada semana y dónde son.
Información sobre el equipo y dispositivos médicos que usa tu hijo y sus medicamentos.
Si tú y tu pareja no pueden llegar a un acuerdo sobre el cuidado y el tratamiento de tu hijo, puedes pedirle a un consejero o mediador que les ayude a crear el plan. La corte también puede asignar a un abogado que represente a tu hijo para que ayude a crear un plan que vele por su bien. Tal vez también asigne a un consejero que ayude en la crianza de los hijos, para asegurarse que tanto tú como tu pareja estén siguiendo el mismo plan de cuidados.
En Texas, a veces la manutención conyugal forma parte de la sección financiera del acuerdo de divorcio. Esta es la cantidad de dinero que uno de los esposos le paga al otro para cubrir los gastos diarios mínimos. Existen ciertas reglas para recibir manutención conyugal. Básicamente se basa en tu situación, necesidades básicas, cuánto gana cada uno y si el padre de familia encargado de cuidar al hijo con discapacidad o necesidades especiales de salud puede trabajar lo suficiente para mantenerse. Es muy importante que sepas exactamente cuáles serán tus gastos de hogar mensuales después del divorcio para que puedas comprobar que necesitas la manutención conyugal.
Estas son algunas cosas que se deben tomar en cuenta cuando se esté estableciendo la cantidad de manutención conyugal que recibirán si tienen un hijo con discapacidad o necesidades especiales de salud:
Administrar el cuidado de tu hijo puede que sea un trabajo de tiempo completo. Si uno de ustedes dos tiene la custodia de tu hijo la mayor parte del tiempo, lo más seguro es que no podrá tener también un empleo de tiempo completo. Quizás no pueda ganar lo mismo que ganaría si la situación fuese otra.
Los servicios de atención de relevo son muy importantes para un padre de familia que tiene que cuidar a su hijo la mayor parte del tiempo. Los cálculos estándar de manutención conyugal deben incluir un monto de dinero suficiente para pagar los servicios de atención de relevo que sean necesarios.
Si no puedes conseguir que te asignen manutención conyugal, puedes quizás pedir una cantidad mayor de manutención de niños para cubrir estos gastos para mantener a tu familia.
Cuando te divorcias, es muy importante que sepas exactamente lo que necesitas para poder cuidar de tu hijo. Estos son algunos de los documentos que necesitas llevar a la corte o a la reunión de mediación que te ayudarán a crear estos acuerdos:
Los registros escolares de tu hijo.
La libreta de cuidados de tu hijo.
La lista de los gastos médicos mensuales de tu hijo, y otros gastos, incluyendo medicamentos, cuidadores, terapias, copagos y más.
El estimado del número de horas que tú (o tu pareja) cuidan de tu hijo. Este debe incluir las horas de cuidarlo en persona, tiempo para programar y llevarlo a sus citas médicas o terapias, coordinar a sus cuidadores, asistir a las reuniones en su escuela y más.
A continuación, hay 3 maneras en las que puedes asegurarte que las finanzas de tu hijo queden protegidas después del divorcio:
Establece un Fideicomiso para Necesidades Especiales. Pide que los pagos de la manutención de niños para tu hijo se depositen directamente en el fideicomiso para que ese dinero no cuente como dinero que recibió de ingreso tu hijo. El padre de familia que tenga la custodia legal de tu hijo puede tomar dinero del fideicomiso conforme lo vaya necesitando.
Tú y tu pareja pueden conseguir pólizas de seguro de vida para cubrir lo que le corresponde a cada uno para el cuidado de tu hijo, si es que uno de los dos fallece. El dinero que pague la póliza en ese caso, también debe depositarse en el fideicomiso para necesidades especiales.
Si alguno de ustedes dos tienen un plan de jubilación 401(k) o una cuenta IRA, éstos planes deben pagar los montos y depositarlos en el fideicomiso de tu hijo. Asegúrate de que ambos tengan testamentos separados que también le paguen al fideicomiso.
El divorcio no es fácil para ningún niño. Aunque hagas todo lo posible por atender sus necesidades, tu hijo tendrá que ajustarse a cambios grandes. Y a veces ajustarse es aún más difícil para los niños con discapacidad o necesidades especiales de salud. Quizás empeoren algunos de los síntomas de la discapacidad de tu hijo. Su comportamiento puede volverse más problemático y un reto mayor. A lo mejor algunas de las destrezas que ya había logrado se le empiecen a dificultar. Todo esto es parte del proceso normal de lidiar con el estrés de la situación y los cambios.
Estos son algunos consejos sobre la manera de hacer que las necesidades de tu hijo sean lo primordial durante el proceso del divorcio.
Trata lo más posible de mantener una rutina consistente. No cambies de cuidadores, mantén el mismo horario, la hora de acostarse y de las comidas, ya que esto será reconfortante para tu hijo.
Considera llevar a tu hijo a más terapias o sesiones de consejería.
Visita nuestra página sucesos importantes de la vida para ver algunas ideas sobre la manera en que puedes hablar con tu hijo sobre lo que está pasando.
Trata lo más posible de no demostrar tu ira o desacuerdo durante el proceso cuando estés con tu hijo. DivorceNet tiene 30 consejos para padres que se están divorciando (en inglés) para ayudar a que el proceso sea más fácil para los niños. También tienen un artículo acerca de crianza de los hijos positiva durante el divorcio (en inglés) que te informa sobra las maneras que puedes arreglar desacuerdos con tu pareja sin afectar a tu hijo.
Estas son algunas sugerencias generales que pueden ayudarte durante el proceso del divorcio:
Encuentra un abogado de divorcio que tenga experiencia en casos de familias que tienen hijos con discapacidad o necesidades especiales de salud. Puedes hacer una búsqueda en línea bajo “abogados de divorcio en Texas para niños con discapacidades” o tratar de estar en contacto con otros padres de niños con discapacidad para ver que te recomiendan.
No siempre es necesario pasar por todo el proceso del divorcio en la corte. Si tú y tu pareja más o menos están de acuerdo en lo que se incluirá en el divorcio, pueden realizar un collaborative divorce (divorcio de colaboración) en inglés o realizar una mediation (mediación) en inglés. Para informarte sobre el proceso, ve nuestro video sobre divorcio de colaboración.
El divorcio es algo que hace que uno se sienta solitario, más no olvides atender tu cuidado personal. Tal vez buscar apoyo te ayude a ti (y a tu hijo). También puedes tratar de estar en contacto con otros padres de niños con discapacidad que también hayan pasado por un divorcio.
Divorciarse es un proceso difícil y emocional para todas las personas involucradas, más sin embargo pueden encontrar un plan que funcione y mantenga a todos contentos y saludables por muchos años por venir, si mantienen el bienestar de su hijo en mente durante todo el proceso.