10 de Agosto de 2016 | De: Gloria Krein Linda Litzinger
Como padres de familia de niños con discapacidad y necesidades especiales de salud, creemos que una buena manera de que ellos hagan ejercicio y aprendan lo que se siente ser parte de un equipo, es que participen en actividades en grupo. También es una buena manera de que padres de familia como nosotros podamos salir de la casa. Sin embargo, a veces es difícil encontrar las actividades apropiadas para nuestros hijos.
Entre nosotras tenemos un total de 4 hijos con discapacidades, incluyendo discapacidad intelectual, física y de aprendizaje. La hija de Linda tiene parálisis cerebral. Gloria tiene un pequeño con discapacidad intelectual y sus tres hijos tienen problemas de salud mental complejos.
Hemos ayudado a nuestros hijos para que participen en diversas actividades, algunas de las cuales son inclusivas, otras son sólo para niños con discapacidades, mientras que otras las hemos hecho por nuestra cuenta. Estas son algunas de las cosas que descubrimos a lo largo del camino y deseamos compartirlas con otros padres de familia.
Algunos programas o actividades se llaman “inclusivos” ya que incluyen a niños con y sin discapacidad. Cuando la hija de Linda era más pequeña, la llevó a clases de baile en el estudio de baile local. Linda la acompañaba en el salón de clase para sostenerla de la cintura y de esta manera ayudar a su hija a hacer los movimientos del baile. Cuando su hija estaba en 2do de primaria, asistió a un campamento de las Girl Scouts y Linda manejaba diario para ir y ayudar a su hija después de que ella nadaba así como también justo antes de acostarse en la noche. Más adelante, su hija también asistió a otros campamentos a los cuales Linda no tenía que ir.
La hija de Gloria empezó con gimnasia olímpica a los 4 años de edad. El lugar donde tomaba las clases de gimnasia olímpica requería que los niños supieran ir al baño por sí solos para poder empezar a tomar clases. Gloria les contó sobre las necesidades especiales de su hija, y ellos accedieron a tratar de ayudarla. Al principio, su hija tenía muchos accidentes debido a que estaba muy nerviosa; así que permitieron que usara pañales durante la clase. Su hija se fue acostumbrando poco a poco a la gimnasia, le gustaba el baño de ahí. El baño también se convirtió en un lugar donde podía descansar cuando se empezaba a sentir abrumada.
El hijo de Gloria participó en una liga local de béisbol y ella descubrió que el entrenador era muy bueno. En cada práctica pasaba tiempo extra con el hijo de Gloria para ayudarlo a desarrollar sus habilidades básicas, como lanzar y cachar. Poco antes de que concluyera la temporada, el hijo de Gloria pudo cachar una bola que batearon hacia el campo donde se encontraba. Todos los padres de familia le echaron porras y él se sintió todo un campeón de béisbol.
Hemos aprendido que hay algunas cosas que son importantes para hacer que las actividades inclusivas funcionen:
A veces, tu hijo quizás desee disfrutar de la comodidad de estar en una liga deportiva o hacer actividades en compañía de otras personas con discapacidad o necesidades especiales de salud. Estos programas se llaman programas adaptativos y en Texas hay muchos. No todos los niños pueden entrar a todos los programas. Por ejemplo, los atletas que participan en las Olimpiadas Especiales deben tener una discapacidad intelectual o un desarrollo mental deficiente.
Los programas adaptativos pueden ser una gran experiencia para tu hijo si llena los requisitos que delinean. Gloria dice que su hija se sintió completamente en su elemento por primera vez cuando participó en las Olimpiadas Especiales. Se sintió cómoda al estar rodeada por sus compañeros. Además, los entrenadores se ajustaron respectivamente al nivel de cada participante y los alentaron.
Estos son algunos lugares donde puedes encontrar programas adaptativos:
Hay veces en las que quizás tu hijo no quiera unirse a un programa deportivo, sin embargo es importante que haga ejercicio. Descubrimos que el simple hecho de estar afuera de la casa puede calmar a un niño que está molesto o aburrido. Estas son algunas ideas que pueden animar a tu hijo a salir y ayudarlo a estar activo.
Con un poco de planificación, tu hijo puede hacer muchas actividades que disfrutará. Hemos tenido un sinfín de situaciones exitosas, así como de algunas derrotas. Pero siempre nos recuperamos, aprendemos algo nuevo y lo hemos intentado nuevamente. Estas experiencias han hecho que la vida de nuestros hijos tanto como las nuestras sean más completas. No cabe la menor duda que ha valido la pena organizar las actividades y crear recuerdos divertidos que duren toda la vida.
Si estás buscando más ideas sobre dónde encontrar actividades para tu hijo, puedes visitar nuestra página web Las actividades después de clases para estudiantes con discapacidad. Ahí encontrarás consejos sobre la manera de iniciar las actividades y cómo elegir una que funcione para tu hijo.