21 de Septiembre de 2015 | De: Monica Castillo
Hay ciertos eventos que se quedan con nosotros para siempre. Cada uno de nosotros tiene los más preciados recuerdos profundamente en nuestras mentes y corazones. Momentos que nos hacen sentir fuerte y momentos que nos ponen de rodillas. Uno de mis mejores momentos fue cuando me enteré de que no tardaría en convertirse en madre. Había mucho que celebrar y mucho que preparar. Tenía que programar las visitas al médico para el cuidado prenatal, preparar el cuarto del bebé, comer sano, elegir un nombre, el ejercicio y no "cosas correctas" y preparar a todos para la alegría del momento.
Y luego en algunas ocasiones todo se detiene, en unos momentos de acontecimientos terribles, el niño que has amado anticipadamente se ha ido. Lamentablemente, todos los años, muchas mujeres experimentan la pérdida de un embarazo o un bebé. Cuando la alegría se convierte en tristeza, es importante recordar que usted no está solo.
Perder esa pequeña vida fue un acontecimiento devastador, pero tuvimos la suerte de contar con el apoyo y el aliento para superarlo. Alguien nos dijo que estaba bien llorar y buscar ayuda. No sabíamos que necesitábamos ese empujón, pero estamos muy agradecidos por ello.
No solemos hablar de dolor. Nadie quiere hablar de estar triste o cuánto nos duele. Se nos enseña a ser fuerte y seguir adelante. ¿Pero qué sucede cuando usted no puede moverse hacia adelante y no sabes qué hacer?
Encontrar apoyo para el duelo y ayudar a lidiar con el dolor es esencial para una recuperación emocional saludable. Los grupos religiosos, las organizaciones sin fines de lucro y los foros en línea están preparados y disponibles para proporcionar ayuda y apoyo. La revista en línea Still Standing está disponible las 24 horas del día y ofrece apoyo en línea para aquellos que experimentan dolor por la pérdida de un embarazo, un niño o infertilidad.
El dolor de perder un embarazo o un hijo lactante no está reservado solamente para la madre. El apoyo emocional está disponible para los padres, abuelos y hermanos. La pena afecta a toda la familia y es importante tener eso en mente.