March 24, 2020 | De: Leslie Curtis
Categorías: Diagnóstico y el cuidado de la salud, Apoyo para la familia
Por 17 años hemos hecho todo lo posible por mantener a nuestro hijo con autismo fuera del hospital aun cuando tiene convulsiones o neumonía. Siempre es mejor estar en casa. Ir al hospital simplemente llena mi corazón de terror.
En el verano pasado vinieron muchos retos a nuestras vidas. Jac tuvo dos cirugías de la columna. Por cada operación estuvo internado una semana. Tuvimos que ser muy creativos para evitar que se volviera loco. Con la ayuda de un especialista del hospital y con algunos trucos, sobrevivimos.
La primera idea fue decorar su cuarto de hospital con fotos de nuestra familia, sus maestros y terapeutas. Esto le ayudó a recordar que estas personas seguían formando parte de su mundo.
También le pedí a las terapeutas fotos de lugares en otros pisos del hospital los cuales sabía que a mi hijo le gustaban, como el barco de piratas, la máquina de palomitas, el acuario, el parque y el trenecito. Usábamos las fotos para jugar con él. Lo paseábamos alrededor del hospital para que encontrara los lugares que veía en las fotos. Cuando lo lograba podía quitar la imagen de la tabla de juego que le construimos. (Gracias a Dios por el Velcro)
Cuando podíamos sacarlo de su silla de ruedas, llevaba serpentinas en aerosol, conocidas como “silly string.” Las serpentinas hacen todo más chistoso y divertido.
Nada le gana a los electrónicos para lograr que nuestro hijo tenga una distracción y sea feliz. Siempre tenemos puestas sus películas favoritas. Hay algo con los personajes de Buzz Lightyear y Woody que lo ayudan a sentirse más tranquilo cuando algún extraño entra a su cuarto. Cuando entraba alguien del personal le preguntábamos quien era su personaje favorito y listo entraban al mágico mundo de Jac.
Una vez que los doctores y las enfermeras entran en el mundo de nuestros niños la vida es mucho más fácil para todos. ¡Al infinito y más allá!
Aquí encontraras ideas de una maleta o un kit para su estadía en el hospital.
Es difícil hacer nuevos amigos siendo adulto y padre de un niño con discapacidad. Sin embargo, ¡el apoyo entre padres sigue vivo en internet!
Categorías: Apoyo para la familia
Ser padre de un niño con discapacidad es un viaje, no un destino. Algunas personas se han enfrentado a ello desde que su hijo nació. Otras se han unido al viaje más tarde en la vida de su hijo.
Categorías: Apoyo para la familia
Mucho de lo que he escrito se centra en el trastorno del espectro autista de mi hijo y en los desafíos del ADHD. Solo por este momento, quiero enfocarme en la absoluta y hermosa felicidad que siento de ser su mamá.
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