4 de Junio de 2015 | De: Stephania WIlliams
El año pasado, tuvimos una gran reunión para mi nieta. Ella tiene Trastorno Hiperactivo de Déficit de Atención (ADHD). Ella definitivamente tiene el tipo hiperactivo. Ella siempre está saltando por todas partes. La mayoría de las veces no se puede enfocar y ella tiene dificultad con la organización. Otras veces, puede soñar despierta.
Estos son algunos de sus retos:
A pesar de estas cuestiones ella es una niña, adorable, educada y muy cariñosa.
El equipo estuvo de acuerdo en algunos acomodos en la clase, incluyendo: sentarse cerca del maestro, acomodos en los examenes y dar sugerencias para organizar sus tareas y papeles. Ella también recibe dos sesiones de terapia del habla (SPL) cada semana. Esto le ayuda a escuchar y procesar instrucciones de varios pasos. Ella tiene dos sesiones de Terapia Ocupacional (OT) cada semana por su letra. Su escritura es pobre debido a problemas motor fino. Su OT también le ayuda con su organización. Ella no necesita apoyo académico en este momento ya que su trabajo está a nivel del grado.
En general, sentí que el equipo del IEP hizo decisiones útiles. Ella está recibiendo lo que necesita para cumplir con sus metas para el año escolar.
La administradora fue particularmente útil. Se podría decir por la forma en que hablaba de que estaba acostumbrada a trabajar con niños como mi nieta. Incluso mencionó que alrededor de los 10 años de edad, algunos niños pueden llegar a ser un poco más organizados. Ella dijo que mi nieta será capaz de compensar la falta de funcionamiento ejecutivo si aprende a utilizar las herramientas.
Sabiendo que mi nieta tiene un equipo de apoyo en la escuela es una maravilla, pero la edificación de ese tipo de relación requiere confianza, determinación, educación y un objetivo común. Si usted está teniendo problemas para conseguir los servicios adecuados para su hijo, visita nuestra página web sobre el derecho de su hijo a una educación pública.