9 de Agosto de 2017 | De: Kelly Mastin
Categorías: Apoyo para la familia
Levanta la mano si alguna vez has sentido que la vida es abrumadora. ¡Levanta la mano si te sientes abrumada en este momento! La vida es difícil. Te mantiene ocupado todo el tiempo y está llena de exigencias.
Como mamá de niños con discapacidad, muy a menudo siento que me estoy ahogando en medio del estrés de la vida. Es muy difícil lograr algo cuando sientes que estás luchando para respirar o para salir de la cama todas las mañanas.
Procuro dar un paso atrás, echar un vistazo a mi vida y encontrar un plan para seguir adelante. Mientras algunas veces todavía batallo para hacer planes o en ponerme metas muy altas, he aprendido que ponerme metas razonables para mí y mi familia es una mucho mejor forma de abordar la situación.
Estas son algunas de mis metas y de mi familia, las cuales tenemos que cumplir cada mes. Quizás mi lista te pueda animar a establecer metas mensuales para ti y tu familia.
Las amistades y la vida social son muy importante para tu salud. Planea algo y hazlo.
Esto es muy importante por varias razones. Es vital que siempre mantengamos en mente la idea de seguir aprendiendo. Siendo una familia que vive con discapacidad, siempre hay cosas que necesitamos aprender. Yo asisto a un entrenamiento de discapacidad, abogacía o educación especial una vez al mes. Puede ser en persona o un entrenamiento en línea.
Siempre estamos trabajando para tener más independencia, así que debemos hacer las cosas deliberadamente. Puede ser ir sumando un paso a la vez, como ayudarlo a empujar un cajón para cerrarlo o agarrar el vaso mientras da algunos tragos. Un mes puede ser que lleve su plato a la cocina, el próximo mes poner el plato en el fregadero, después lavar el plato. En ocasiones establezco metas tan pequeñas como que intente pasar la camiseta por la cabeza y solo mostrar un poco de interés en ayudar. Mantén las metas pequeñas y alcanzables.
Recuerda esto también puede ser algo pequeño. Puede ser el cajón de los calcetines, las ollas o la guantera del carro. Pero as algo para ayuda a mejorar el desorden y el caos.
Se siente una gran satisfacción. Me gusta hacerle de comer a algún amigo cuando se enferme o comprarle un refresco a la maestra. El hacer voluntariado también entra en esta categoría. Cuando mi vida se torna difícil me ayuda el voltear y ayudar a alguien más.
Como puedes ver estas metas no necesitan ser altas ni grandiosas. Recuerda hacer planes que funcionen para ti y establecer otras para tu familia si son muy diferentes a las tuyas. Mantente al pendiente para adecuar o cambiar los planes cuando sea necesario. Asegúrate de ser bueno contigo mismo cuando no llegues a tu objetivo.
Encuentra más información acerca de la vida diaria y como ayudar a tu hijo a conseguir su independencia. Busca los archivos de blogs para que aprendas de las experiencias y consejos de otras familias.
Trabajar desde casa permite centrarse en las prioridades. Primero, soy cuidador y, segundo, soy todo lo demás.
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Incluso aunque haya pasado mucho tiempo, es importante que los cuidadores empiecen a cuidarse a sí mismos. Ponerme al corriente con mi atención médica y hacer cosas solo para mí me ha hecho sentirme más feliz y saludable.
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¿Quién fue el que dijo: “nada permanece, excepto el cambio”? Ojalá que esa persona pudiera decirnos cómo manejar los cambios a quienes no nos gustan los cambios, ni siquiera los que son buenos.
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