Desarrollando resilencia

No creo en el concepto de que “los hijos especiales solo les llegan a padres especiales”. Realmente no me veo a mi misma siendo diferente de otro padre por ahí. Pienso sencillamente que me ha pasado para ser bendecida con un niño con necesidades únicas. Pero no es porque soy especial o súper padre o nada por el estilo. 

Yo, sin embargo, creo que ser el madre de un niño con una discapacidad me ha convertido en una mejor persona, una persona más fuerte. Creo que ser un padre para mi hijo me ha hecho desarrollar un sentido de resiliencia irrompible. El diccionario define la "resiliencia" como "la capacidad de recuperarse rápidamente de las dificultades, la tenacidad"... y hombre, tengo la habilidad de hacer eso.

Esta semana fue especialmente difícil.

Todos sabemos lo difícil que es encontrar una guardería para un niño con una discapacidad y luego de cerca de dos meses de búsqueda, finalmente encontramos un lugar que pensamos que podríamos llevar a nuestro hijo y darle el cuidado extra que necesita.

Esta semana nos dimos cuenta que el propietario dio a otra persona el espacio que habíamos reservado. Estábamos absolutamente devastados. Estábamos de vuelta en el punto de partida tratando de encontrar un programa de cuidado para después de la escuela para nuestro hijo. Esta se convirtió en una tarea casi imposible.

Sería mentirosa si dijera que no lloré. Estaría mintiendo si dijera que no nos sentimos frustrados y totalmente molestos. Pero también estaría mintiendo si dijera que no nos recuperamos rápidamente.

Después de un día lleno de frustración, nos pusimos a trabajar en un plan B y nos dispusimos a averiguar la solución a este problema. No había tiempo para pensar o estar molesto. Al final, eso no era productivo. Teníamos que ser productivos. Aun no habíamos resuelto nuestro problema, pero sabía que lo haríamos.

Y creo que eso es lo que nosotros como padres hacemos muy bien. Creo que estamos tan acostumbrados a los "problemas", ya sea con el seguro, citas con el médico, reuniones de IEP o lo que sea, que estamos pensando constantemente en soluciones. Siempre estamos tratando de encontrar respuestas, de entender las cosas y hacer las cosas mejor porque; 1) que estamos acostumbrados a que las cosas vayan mal y; 2) sabemos cómo manejar la situación cuando las cosas van mal. ¿Será eso un conjunto de habilidades con las que nacemos? No necesariamente, pero sí son cualidades que desarrollamos con el tiempo y es algo que realmente hacemos muy bien.

Así que no, no creo haber sido especial antes de que mi hijo naciera. Sin embargo, creo que he desarrollado habilidades especiales. He desarrollado una espalda resistente, una piel gruesa y la capacidad de mantener mi pánico al mínimo.

Reflexiono y pienso en lo afortunada que soy de haber desarrollado esas habilidades. No sé si las tendría de otra manera. Así que como he dicho, yo no era un padre especial antes de que naciera mi hijo. Pero estoy absolutamente seguro de que lo soy ahora. Y tú también.

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