20 de Septiembre de 2018 | De: Sherry Santa
Categorías: Diagnóstico y el cuidado de la salud, Apoyo para la familia
Mi hijo tuvo su primera hospitalización psiquiátrica a los 9 años de edad. Decir que no estaba preparada para eso es quedarme corta. No sólo me preocupaba el bienestar de mi hijo durante la crisis, también me preocupaba lo que iban a pensar mis familiares y amigos.
Estaba lista para ser juzgada. Pero creo que no estaba preparada para ser ignorada. Era casi como si otros papás, amigos y familiares pensaran que por hablar de la condición de mi hijo los iba a marcar o hacer un daño. O que era contagioso en alguna forma. Así que mejor me evitaban.
No fue nada parecido a cuando mi hija paró en el hospital dado a una gripa y asma. Entonces todos nos hablaron para preguntar como estábamos, preguntando si podían ayudar de alguna forma. Nos querían traer comida y ayudar con los otros niños. E irónicamente ella si tenía algo contagioso.
Desafortunadamente, no pasó así con la hospitalización de mi hijo, pero aprendí muchas lecciones muy valiosas en esa ocasión.
Entendí que no todos pueden entender el mundo complejo de las enfermedades mentales. Inmediatamente supe con qué amigos y familiares podía hablar de lo que estaba pasando y cuales se alejaría y no estarían ahí para mí.
Un efecto secundario e inesperado de la hospitalización fue que nos hicimos de una “nueva villa” de personas. Personas que ya han pasado por el solitario camino de la salud mental. Ellos estuvieron a mi alrededor en esos momentos. Me recordaron que mi hijo estaba obteniendo el cuidado médico que necesitaba. Mental o físico no importaba.
Como sociedad, necesitamos tratar las enfermedades mentales y físicas por igual. Las dos son esenciales para una buena calidad de vida.
Aquí encontraras más información acerca de Salud Mental y del comportamiento.
La última vez que mi hijo estuvo en el hospital, era un hospital infantil. Pero hace poco, después de caerse de la cama y romperse una pierna, lo llevaron a un hospital de adultos y tuvieron que operarlo. Estoy eternamente agradecida con los médicos y enfermeras que lo atendieron en todo momento.
Categorías: Diagnóstico y el cuidado de la salud, Transición a la edad adulta
Tus planes de emergencia podrían ser diferentes, pero sin importar cómo sean, pueden marcar la diferencia.
Categorías: Apoyo para la familia
A pesar de las dudas de los demás, la cuidadosa atención de una madre a las señales verbales y no verbales de su hijo pone de relieve la importancia de escuchar a los niños con discapacidades y defender sus necesidades.
Categorías: Apoyo para la familia