La clase exclusiva de educación especial

Como padre de un niño con discapacidad, enfrento decisiones difíciles todo el tiempo. Escojo doctores, terapistas y cuidadores. Y también escojo a qué clase asistirá en la escuela.

Conforme a lo dispuesto en IDEA (la legislación federal que dirige el Programa de Educación Especial), los sistemas de escuelas públicas deben ofrecer una variedad de clases para los niños que tienen discapacidades. Estos grupos incluyen clases exclusivas para niños con discapacidades significativas hasta clases de educación general con servicios de educación especial -y cualquier otro punto intermedio. Todo depende del Comité del ARD para decidir cuál es el ambiente más apropiado para mi hijo.

Con niños como mi hija que necesitan mucho apoyo, la escuela recomendará una clase exclusiva de educación especial.

Los maestros explican que esta será la manera en que un niño obtenga la atención personalizada que necesita. Los educadores explican que será un ambiente seguro para ella, lejos de niños más grandes, rápidos y aquellos que pudieran intimidarla. También explican que el plan de estudios se ajustará a un ritmo que es bueno para ella y que las terapias especiales que necesita están disponibles allí. Y todo el mundo alrededor de la mesa está de acuerdo en que la clase exclusiva es la mejor opción para ella.

Pero parece que el Comité no ha pensado en algunas cosas muy importantes.

• En la clase exclusiva de educación especial mi hija no conocería el currículo completo que los otros estudiantes estarían a prendiendo al final del pasillo. Su currículo se enfocaría en pre-requisitos y se perdería de la riqueza del currículo completo.   Hay cosas que se enseñan en educación general que mi hija nunca escucharía.
• En la clase exclusiva, mi hija no tendría el beneficio del modelo de sus compañeros sin discapacidad. En la clase exclusiva, sus únicos compañeros serian aquellos con dificultades en comunicación, autodependencia y aprendizaje. Se perdería de interactuar con compañeros que la pudieran apoyar, guiar y ser ejemplo para ella.   
• En la clase exclusiva, mi hija tendría más posibilidades de ser abusada. El abuso es más raro en educación general. Los mismos estudiantes ven y reportan lo sucedido. Alumnos en clases exclusivas usualmente tienen dificultad para comunicarse y pueden contarle a alguien de confianza lo que sucede en el salón. Las puertas cerradas y la segregación de estas clases resultan carecer de supervisión, lo que ha resultado en un alarmante incremento de casos de estudiantes abusados.

Educación Especial es un servicio no un lugar. Las terapias y la educación especial se pueden ofrecer en cualquier lugar. Mi hija puede obtener esos apoyos en el salón de educación general. Quizás nadie en su escuela lo ha visto hacer de esa manera antes, pero realmente se puede hacer.

Como padres, debemos sopesar cuidadosamente nuestras opciones antes de aceptar simplemente una recomendación para el salón contenido. Hay que estar atento para decidir qué ambiente es el más adecuada para nuestros hijos.