23 de Octubre de 2018 | De: Shailen Singh
Categorías: Apoyo para la familia, Transición a la edad adulta
Me doy cuenta que hoy las personas no dudan en tratar a mi hijo con respeto y amabilidad. Es muy joven, es dulce y las personas lo tratan como niño chiquito. Le hablan como bebé lo cual está bien porque a él le encanta ser el centro de atención. Es un lindo niño y a la gente le encanta interactuar con niños lindos.
Sin embargo, no puedo dejar de pensar: ¿Qué pasará cuando sea mayor? ¿Qué pasará si sus habilidades cognitivas nunca son mayores que las de un niño? ¿Lo tratará la gente con el mismo amor y amabilidad?
Cuando esté más alto y que físicamente se vea como un joven, ¿habrá el mismo nivel de amor?
Cuando sea un joven y se le empiece a notar un bigote ralo, ¿será la gente todavía amable y lo amará de la forma que lo hacen ahora?
Creo que es más fácil interactuar con niños con discapacidades porque sabemos cómo interactuar con niños en general. Pero cuando los niños se vuelven adolecentes, batallamos para encontrar la forma de interactuar con ellos. ¿Los tratamos como iguales? ¿Los tratamos como tratamos a los niños?
Y en ocasiones pienso, intencionalmente o no, esto tiene como resultado un aislamiento para los niños con discapacidades, así como sus padres. Es más fácil evitar interactuar con estas personas que arriesgarte a cometer un error o que te sientas incomodo al interactuar con una persona con discapacidad.
Lo entiendo. No me gusta, pero lo entiendo.
De cualquier forma, cada vez que veo a alguien portarse de una manera dulce o tierna con mi hijo solo pienso si eso continuara en el futuro. ¿Y cómo lo puedo preparar emocionalmente en caso de que eso no suceda?
Y permíteme ser claro. No estoy buscando que la gente haga hasta lo imposible para interactuar con mi hijo cuando crezca. Solo quiero que lo traten con la dignidad y respeto que él se merece como persona. (Si eso tiene algún sentido). No quiero que eviten interactuar con él.
Sera siendo la misma persona. Espero que la gente reconozca eso.
A medida que nuestros hijos crecen, hay muchas transiciones en la vida. Hay muchas formas de brindar apoyo y cuidado que ellos son ahora. Aquí encontraras historias de la vida real así como información en cómo construir redes personales.
Trabajar desde casa permite centrarse en las prioridades. Primero, soy cuidador y, segundo, soy todo lo demás.
Categorías: Apoyo para la familia
Incluso aunque haya pasado mucho tiempo, es importante que los cuidadores empiecen a cuidarse a sí mismos. Ponerme al corriente con mi atención médica y hacer cosas solo para mí me ha hecho sentirme más feliz y saludable.
Categorías: Apoyo para la familia
¿Quién fue el que dijo: “nada permanece, excepto el cambio”? Ojalá que esa persona pudiera decirnos cómo manejar los cambios a quienes no nos gustan los cambios, ni siquiera los que son buenos.
Categorías: Apoyo para la familia